Muchas personas dudan sobre si comprar una tablet o un smartphone. Lo cierto es que el uso de estos dispositivos móviles se ha convertido casi en una práctica natural. Quienes los usamos los necesitamos casi para todo: para comunicarnos, para informarnos, para trabajar y estudiar y para navegar por Internet. Y es que aunque no siempre utilizamos las tablets para conectarnos a la red, lo cierto es que son muchas las ventajas que ofrecen los modelos con 3G y 4G. Incluso podríamos decir que Internet en una tablet es tan necesario (o más) que en un smartphone.
Lo cierto es que cuando hablamos de celulares ya damos por hecho que van a llevar conexión a Internet. Es decir, prácticamente ningún usuario que se compre un celular buscará un modelo sin acceso a la red. Y es que precisamente el principal atractivo de los smartphones es su capacidad para conectarnos y utilizar aplicaciones. Usamos el celular para mandar y recibir mails, para comunicarnos con el resto de la gente, para conectarnos a las redes sociales, para escuchar música, ver vídeos, informarnos… La lista de funciones es interminable. Y todo gracias a Internet.
¿Qué ocurre en el caso de las tablets? Muchos de los usuarios que eligen este dispositivo lo hacen por su pantalla. No en vano es su principal atractivo y contra ella los smartphones no pueden competir. En las tablets podemos reproducir contenidos audiovisuales con gran calidad. Además, si elegimos un modelo ligero y fácil de manejar, se convierte en un dispositivo capaz de cumplir muchas de las funciones de los smartphones. Algunas, incluso, se realizan mejor con la tablet, como editar fotografías, leer o trabajar.

Conexión 3G/4G en la tablet

Para ello, sin embargo, es necesario disponer de conexión a Internet, algo por lo que no siempre apuestan los usuarios. En el mercado podemos elegir entre modelos que solo están equipados con Wifi y tablets con 3G. ¿Por qué muchos optan por las primeras? La razón principal es el precio, ya que las tablets con Wifi suelen ser entre un 10 y un 20 por ciento más económicas. Con ellas es posible conectarse a la red mediante hotspots móviles, como por ejemplo un smartphone, y dominios Wifi públicos. No obstante, sin estas opciones las tablets se quedan aisladas y sus funciones, limitadas.
Las tablets con 3G/4G son capaces de acceder a Internet en cualquier lugar en el que haya una señal de teléfono celular. Esto permite el acceso a Internet en lugares donde es difícil encontrar o crear una señal Wifi. Además, los usuarios necesitan contratar un plan de datos para utilizar la tecnología 3G. Actualmente, y dado que la demanda de Internet móvil va en aumento, las operadoras se esfuerzan por ofrecer planes interesantes. En T-Mobile, por ejemplo, es posible obtener cobertura LTE nacional para las tablets que sean compatibles y elegir un plan de datos acorde a nuestras necesidades.
Ya ves que el uso de Internet para un celular y para una tablet es muy similar, incluso puede combinarse. Quienes estén pensando en comprar un tablet deberían tenerlo en cuenta. Lo más recomendable es elegir un modelo 3G ó 4G, aunque sea sin contrato de datos. Así se aseguran que este dispositivo les ofrece todas las posibilidades.