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Parece que la cosas van de mal en peor en Twitter. Esta semana, el afamado programador George «GeoHot» Hotz, quien había sido contratado directamente por el CEO de la red social, Elon Musk, decidió renunciar a su cargo luego de apenas un mes de labores.

Hotz es recordado no tanto por sus logros, digamos, «legales», sino más bien por sus hackeos de gadgets considerados inviolables como el iPhone y la consola de videojuegos PlayStation 3. Musk había contratado a Hotz para arreglar una parte específica de Twitter: su motor de búsqueda.

El programador aceptó el trabajo pensando en quedarse poco tiempo —unos 4 meses—, pero terminó por renunciar apenas dos días antes de cumplir su primer mes. Y como la ironía no tiene bandera, Hotz anunció su renuncia a través de unos tweets:

«Entre la comida recalentada de Uber Eats, un compromiso cuestionable a la libertad de de expresión, las actuales políticas de oficina y un empuje a las funciones, vi que no habia nada sustancial que podía hacer allí«, detalla Hotz en uno de sus posteos de despedida.

Por lo que da a entender en sus tweets, Hotz se aleja de Twitter al no sentir que su trabajo fuera a causar un verdadero impacto. Pero también es bien sabido que Elon Musk, tan genio como muchos lo puedan considerar, está trayendo más problemas que soluciones durante su paso por la plataforma del pajarito azul.

Fuente: Kotaku