
Un grupo de 19 testers de QA en Raven Software, uno de los estudios que trabaja en Call of Duty, anunció que se ha firmado el primer contrato sindical con Microsoft y la Game Workers Alliance-CWA. Después de casi tres años de negociaciones, estableciéndose algunos parámetros como un aumento salarial garantizado del 10% en dos años, más aumentos adicionales por mérito y promociones.
Se eliminará el crunch, dándose avisos de 7 días antes de la hora extra obligatoria, sin exceso en semanas consecutivas, horarios flexibles y límites estrictos al trabajo forzado. También se han dado avances laborales como definición de descripciones laborales, procesos claros de promoción, bridging de tiempo laboral temporal, mejores condiciones de discapacidad y protecciones ante despidos, incluyendo indemnización, derecho a recontratación, subsidios COBRA y servicios de transición profesional.
Este contrato marca un comienzo importante dentro de la industria de los videojuegos al establecer estándares para otros estudios y funciones de QA. Por su parte, habla sobre cómo Microsoft continúa con sus políticas de firmar acuerdos de neutralidad sindical tras la adquisición de Activision Blizzard.