Una versión cercana al 98 % de finalización del port cancelado de Resident Evil para Game Boy Color ha sido compartida online por el sitio de preservación de videojuegos Games That Weren’t, sorprendiendo a la comunidad retro y a los aficionados de la serie. Este build proviene de la etapa en la que el proyecto fue cancelado a mediados de 2000, justo antes de que se dejara de desarrollar definitivamente.
El proyecto original fue llevado a cabo por el estudio británico HotGen, que tenía el reto de adaptar el juego de PlayStation a la limitada capacidad técnica de un cartucho de Game Boy Color. A pesar de las enormes restricciones de hardware, el equipo logró reducir y reimaginar muchos aspectos del juego para que funcionaran en un sistema de 8 bits. El nuevo ROM filtrado incluye contenido que no estaba presente en las filtraciones anteriores, como el enemigo Tyrant y la escena final, lo que aumenta significativamente las posibilidades de que esta versión se pueda completar desde el inicio hasta el final.
Según declaraciones del asistente de programación Pete Frith, uno de los desarrolladores originales, el build compartido representa el estado del proyecto justo antes de su cancelación y es probablemente lo más cercano a una versión terminada que existe, estimándose su finalización alrededor del 98 %. Aunque Games That Weren’t aún no ha confirmado si el juego es completamente jugable sin glitches, han añadido opciones como hacks para saltar directamente a secciones avanzadas o al enfrentamiento final con Tyrant para explorarlo sin recorrer todo el contenido.
La razón de la cancelación sigue siendo objeto de especulación: Capcom decidió dejarlo sin lanzar pese al avanzado estado de desarrollo, y en su lugar terminó financiando un título distinto que sí llegó al mercado para la misma plataforma (Resident Evil Gaiden). En retrospectiva, la aparición de este build revive uno de los proyectos más “imposibles” y ambiciosos de la era de los juegos portátiles, ofreciendo a los aficionados una oportunidad única de explorar una pieza inusual de la historia de Resident Evil.
