Al parecer, todos —o al menos casi todos— los juegos de pelea tienen una adaptación de anime en formato de largometraje (uno que otro lograron ser serializados, pero no todos). Evidentemente las franquicias más populares, como “Street Fighter”, han sido adaptadas más de una vez, pero sagas un poco menos famosas —o que apuntan a un público más nicho— como “Samurai Shodown” también cuentan con este tipo de producciones. A diferencia de otras cintas animadas, no obstante, “Samurai Shodown: The Motion Picture” no es un filme que pueda recomendarles. Incoherente y carente de tensión, se trata de una de las adaptaciones animadas más mediocres que haya visto hasta el momento.

Los problemas comienzan con la historia. Cien años después de su muerte, seis soldados sagrados resucitan para buscar justifica y vengarse del compañero que los traicionó para trabajar con una diosa malvada. Luego de buscar en varios lugares, llegan a la provincia de Edo, buscando al último guerrero sagrado, Haohmaru, y su némesis, Shirou Amakusa. ¿Podrá este grupo de soldados vencer a sus enemigos jurados? ¿Podrá ganarle la luz a la oscuridad, o se repetirá la misma historia? ¿Debería importarnos algo de esto si es que, aparentemente, pueden revivir así no más?

La trama es sencilla; el problema no es que sea difícil de entender. El problema es que no está desarrollada de manera suficientemente interesante como para que a uno le pueda interesar. Tener a seis protagonistas no es una buena idea, a menos que uno sea capaz de darles personalidades bien definidas y entretenidas; ese no es el caso en “Samurai Shodown: The Motion Picture”. Los personajes no podrían ser más planos, más aburridos, por lo que uno jamás lora identificarse con ninguno de ellos. Puede que los diseños de los peleadores sean atractivos y que sus poderes luzcan impresionantes, pero si no hay personalidad detrás de nada de eso, ¿cuál es el punto?

Cero tensión

Además, también está el hecho de que se sienten demasiado poderosos. Sus habilidades se manifiestan a través de poderes de energía, fuego, truenos, magia, o tornados. Todo luce muy bien, pero no es más que un espectáculo vacío; los personajes tienen características tan genéricas, y sus poderes son tan exagerados, que toda escena de acción carece de cualquier tipo de tensión. Sabemos que los personajes jamás están en peligro precisamente por lo que son tan fuertes, por lo que uno jamás teme por ellos ni siente temor por ellos; las peleas, por ende, se convierten en experiencias ridículamente monótonas, inverosímiles, y hasta tediosas.

La animación, al menos, no es de mala calidad. Las escenas de acción, por más monótonas que puedan llegar a hacer, está animadas de manera súper fidedigna a su fuente de inspiración, utilizando los mismos poderes y movimientos que los personajes del videojuego. Los personajes, también, están diseñados tal cual los juegos, lo cual, siendo honestos, en realidad, funciona mejor en el mundo virtual de los 8 bits ó 16 bits, que en el mundo del anime. No es la película peor animada que jamás haya visto, pero tampoco es la mejor. No creo que llegue al nivel de “Street Fighter 2”, por ejemplo, pero tampoco luce mal.

No obstante, y por más que el foco de una cinta de este tipo siempre vayan a ser los combates, no pude evitar sentir que la narrativa —si es que puede llamarse de esa manera— de “Samurai Shodown: The Motion Picture” no era más que una excusa para mostrar a un montón de personajes mal desarrollados pegándose el uno al otro. Es una cosa tener una historia sencilla —como en otros filmes animados basados en videojuegos— pero otra cosa es tener una narrativa que no tiene nada de sentido, y que resulta incoherente incluso para aquellos que estén acostumbrados a este tipo de producciones. Las motivaciones de los personajes no son claras, y la mayor parte de escenas, en vez de sentirse interconectadas las unas con las otras, parecen estar aisladas, como una sucesión inconsistente e inconexa. La estructura de “Samurai Shodown: The Motion Picture” es francamente casi inexistente.

Ni para los fans

No hay mucho más que pueda decir sobre “Samurai Shodown: The Motion Picture”, lamentablemente. Se trata de una producción innegablemente decepcionante, una película decentemente animada y con diseños fieles al videojuego, pero que carece de una historia interesante o de personajes con personalidades bien definidas. Monótona, repetitiva y sorprendentemente carente de tensión, “Samurai Shodown: The Motion Picture” es de las adaptaciones animadas de videojuegos más mediocres que jamás haya tenido el infortunio de ver. No se la recomendaría ni a los gamers casuales, ni a los fanáticos de la franquicia.