Mientras el escándalo por las microtransacciones en Star Wars Battlefront II todavía no termina de disiparse, una nueva tormenta viene en camino para Electronic Arts. Los beta-testers del juego UFC 3, el nuevo juego de pelea de EA Sports, echaron un vistazo al modelo de microtransacciones de este juego. Y lo que descubrieron es sumamente cuestionable.

UFC 3 cuenta con cajas de loot que se pueden adquirir con dinero real. En estas cajas de loot, además de ítems cosméticos, hay boosters que pueden incrementar fuertemente los stats de un luchador. Estos boosters funcionan durante un tiempo limitado antes de expirar, animando al jugador a conseguir más mediante la compra de cajas.

Además, todos los upgrades a técnicas y habilidades se consiguen mediante cajas de loot, y no hay otra manera de obtenerlos. Los luchadores adicionales también aparecen mediante estas cajas, nuevamente empujando a comprar más cajas para poder equipar rápidamente a tu luchador.

Pero esto no es todo. UFC 3 cuenta con dos sistemas de bonuses más: los perks y boosts. Ambos también dan bonuses temporales a todo tipo de aspectos de los luchadores. Por ejemplo, un puñetazo más fuerte o una defensa más efectiva pueden ser adquiridas mediante perks y boosts por un tiempo limitado. Mientras más raro el loot, más fuertes serán las técnicas o mayores serán los stats del luchador.

Esto convierte a UFC 3 en un juego que induce fuertemente a los jugadores a pagar para obtener ventajas en juegos online, o siquiera, para poder ser competitivos en la arena virtual en el modo Ultimate Team. Como afirman en Astute Gaming, un jugador totalmente nuevo puede desembolsar 1000 dólares, y aún con “mala suerte”, podrá conseguir suficientes drops raros como para poder equipar luchadores con las mejores técnicas y golpes, una gran cantidad de vida y resistencia, y simplemente acabar con sus oponentes fácilmente en el modo multiplayer, aún por encima de jugadores con mayor skill.