Hace unos días circularon curiosas capturas de pantalla de Super Mario Odyssey. En estas aparecían imágenes para adultos, y la gente se preguntaba cómo era posible que la seguridad de Nintendo fuera vulnerada de esta manera. Ahora sabemos la razón: esto se trata de un capítulo más de la batalla entre hackers de la Nintendo Switch y la compañía japonesa.

Con una copia pirata de Super Mario Odyssey, es posible insertar cualquier imagen en el avatar de un jugador. Luego este avatar saldrá en mayor tamaño en Balloon World, el nuevo DLC del popular juego de Mario y Cappy.

Este uso del hack de Nintendo Switch es probablemente uno de los más “benignos” (a pesar del escándalo armado por padres de familia cuyos hijos pueden ver estas imágenes). Otros usos más comunes incluyen jugar juegos piratas, ejecutar emuladores, correr software de terceros como navegadores, usar cheats en juegos online, etc.

Nintendo está actualmente enfrascado en una batalla contra estos hackers. Ha creado un método que permite detectar la firma digital de cada juego, para determinar si se trata de una copia pirata. Y al detectar una, puede banear la cuenta y consola del usuario para que no vuelva a funcionar.

Como se recordará, desde inicios de año se detectó una vulnerabilidad en la Nintendo Switch, que podía ser explotada gracias a su hardware, y no podía ser reparada sin cambiar de consola. Meses después, este hack se está popularizando, y ya hay cientos de usuarios empleándolo para jugar juegos piratas, y hacer piruetas como cambiar su avatar para poner fotos porno.