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¿Sabías que en Ni No Kuni hacen referencias a culturas prehispánicas del Perú? Un dato curioso como previo al lanzamiento de la nueva entrega de la saga.

El Perú y sus culturas prehispánicas han servido de inspiración para muchas historias, ya sea en novelas, películas y más recientemente en videojuegos.

Luego del anuncio de Ni No Kuni II: Revenant Kingdom, programado para inicios del próximo año, ha llegado la hora de recordar un dato curioso que ha tenido su primera entrega y, si que vale la pena resaltar (ya que aparentemente nadie lo hizo nunca).

En Ni No Kuni: La Ira de la Bruja Blanca, desarrollado por Level-5 junto a Studio Ghibli y distribuido por Bandai Namco, podemos apreciar una fuerte inspiración de culturas peruanas en el diseño de algunos lugares de este mundo fantástico y lleno de magia.

 

ALERTA DE SPOILERS

La siguiente sección contiene spoilers menores del juego, nada muy grave pero vale hacer la advertencia:


La ciudad Perdida

En una parte avanzada del juego, tenemos como misión buscar una antigua ciudad, de la cual incluso se decía que ya no existe. Pero grande fue la sorpresa que tuve cuando encontré que la ciudad “Perdida” era, básicamente, Machu Picchu.

En el exterior se ve claramente la montaña con la forma del Huayna Picchu, rodeada de andenes y la ciudad “Perdida” a sus pies. Obviamente el nombre está inspirado en el hecho que Machu Picchu se mantuvo aislada del mundo durante años.

En el interior podemos ver referencias en la arquitectura hecha en piedra, un portal en forma de tumi, la ropa de los habitantes, quienes usan ponchos y chullos, hasta vemos a un animal nativo llamado “llapaca” o “llapaquitas” de cariño, que es una combinación de alpaca y llama.

Sin embargo, al tratarse de una ciudad “perdida en el tiempo” no contaba con canción de fondo. Fue muy doloroso saber que el gran Joe Hisaishi pudo haber compuesto un tema con referencias andinas, pero jamás lo hizo. ¡Una lástima!

 

La líneas indican el camino

Más adelante, debemos ubicar las ruinas de una antigua ciudad llamada Nazcaá (nombre recontra creativo), a la cuál solo se puede acceder desde el aire para ubicar unos “dibujos en la tierra” que nos llevarán por el camino adecuado.

Creo que no es necesario aclarar que se refiere a las Líneas de Nazca. Sin embargo, un me pareció curioso que un par de amigos no recordarán este segundo detalle. Quizá sea por el tiempo que pasó desde que lo jugaron o simplemente andaban distraídos.

Sea como sea, el Perú tiene cada vez más presencia en la mente de las personas en todo el mundo y eso se ve reflejado en varias producciones artísticas.


Dentro de poco estaré lanzado una pequeña nota con mis impresiones generales del juego, así que estén atentos a “La Ocarina de Spektro”. ¡Nos vemos!

Coméntanos, ¿qué otro juego recuerdas donde se menciona o se inspira en Perú?