Las acusaciones contra Facebook continúan, debido al mal manejo de la información y las secuelas del caso Cambridge Analytica. La empresa de Mark Zuckerberg tiene un gran poder sobre mucha información sensible que los propios usuarios comparten voluntariamente, a sabiendas o no. ¿Hay una solución para estos problemas? Sí, pero no necesariamente les va a gustar a todos.

“Para no depender de la información recopilada, Facebook tendría que ser un producto pagado”, manifestó Sheryl Sandberg, la oficial en jefe de operaciones de esta red social, en una entrevista para NBC. Los ingresos de Facebook están basados en la publicidad dirigida, y para que esta sea efectiva, necesitan tener los datos de los usuarios con el fin de clasificarlos para potenciales anunciantes.

Si Facebook no pudiera recopilar información, sería incapaz de dirigir los anuncios a un público objetivo específico, y estos anuncios perderían efectividad. Por lo que los anunciantes invertirían menos en la publicidad y no tendría un modelo de negocio viable. Pero por otro lado, ¿el público aceptaría pagar por Facebook o un servicio similar?

Digamos que mañana Mark Zuckerberg va a la cárcel por las investigaciones del caso Cambridge Analytica, y la empresa es disuelta por las autoridades norteamericanas (caso bastante extremo). ¿El público aprenderá la lección y decidirá usar una red social de paga con mayores medidas de seguridad? ¿O se volcará a una nueva red social gratuita, incluso a una existente proveniente de países como China y Rusia que ya existen y puedan usar más rápido? Creo que todos sabemos la respuesta a esta pregunta.

De todos modos, los problemas con Facebook y su manejo de la información (que sí es pobre y poco clara para mucha gente), continuarán apareciendo. Hace unos días, Facebook tuvo que confesar que sí lee y escanea los mensajes privados y el contenido enviado por Messenger, lo que no ayuda a mejorar la relación con el público preocupado.